Meditación
El estereotipo reconocido sobre lo que es la espiritualidad va a cambiar por completo de lugar, de espacio, de tiempo y de sitio.
Hay una renuncia certera a los condicionamientos de su cuerpo, de su mente, de su espíritu, a los condicionamientos que desequilibran y aceptan un compromiso sincero con ustedes mismos. Para variar, dejarán de pensar sólo en el momento en que instalen su cuerpo en la tierra, su eje en el centro y su mirada en el Universo.
No tomen caminos errados, tomen los adecuados. No tengan miedo; el miedo es innecesario. La verdad siempre nace del corazón, del alma, del espíritu y no de la mente empírica, sino de la mente consciente que, de una manera solícita y valiente, pregunta, defiende, sostiene sus propios criterios y los criterios que aúna de otras fuentes. No teman preguntar si fuera necesario. No teman actuar si lo necesitan o es preciso. No teman las muestras de afecto verbal, emocional o psíquico.
Todo está conectado dentro de un rango de la Conciencia del Amor, el Verbo sagrado, la comunicación a todos los niveles. Estructurar un campo de luz significa comprometerse consigo mismo y con ese propio campo de luz. No estimen necesario hacer nada extraordinario. Ya hacen algo verdaderamente maravilloso: confiar los unos en los otros y, dándose la mano, caminan en el mismo lado.
Lo paradigmático siempre forma parte de la humanidad. Los cambios o crisis son necesarios para evolucionar. Los sentimientos y las emociones son la forma de evolucionar dentro del camino de la unidad y, por supuesto, con aquello con lo que conectan es con la energía primordial.
Cuando ustedes conecten su cuerpo en la intimidad, con su mente espiritual, realmente podrán comprobar que es muy fácil meditar, dado que no han de hacer nada extraordinario. Tan sólo comunicarse con su ser interior y permitirle la acción, la comunicación, la sanación o cualquier otro registro necesario. No para su utilidad, sino para su comunión personal y grupal. Mediten siempre serenamente, no se vayan excelsamente; simplemente sientan que son parte de esa unidad. Ya son parte de esa unidad. Ya han formado el crisol. Se está abriendo la flor y se manifiesta el caudal azul más impresionante que puedan imaginar. No, no se desestima a nadie. Realmente, cada uno recibe lo que subyace en él mismo y, desde la presencia de cada uno, albergará o no esa situación (conveniente e inconveniente) para solucionar, reestructurar o recolocar.
Por supuesto, son seres humanos. Ahora, háganme caso. Conecten sus manos en su centro. Utilicen el elemento tierra como algo necesario para su conexión espiritual. No se trata de otra cosa: de la vibración de la armonía que genera la sintonía del Amor. Probablemente, sean conscientes en algún momento de lo que se transmite y siente a través de este caudal. Los mismos seres de luz que fueron en otras vidas son ahora en esta, cubierta por… su parte física (su ergonomía). Es preciso que estén presentes y que armonicen… y armonicen… y armonicen.
Despertarán la sincronía de lo general, de lo armónico, de lo divino. La despertarán. No digo que la reconozcan en su totalidad. Hospedan con el máximo amor la energía del Espíritu Santo y permiten la transmutación de todos los elementos que se han desacompasado en su interior.
Si otorgan perdón a los semejantes que dañaron o que les dañaron, simplemente recurrirán a la resolución, a la transmutación, a este perdón universal. Si se dan permiso para reconocer su desincronía, sus pensamientos inarmónicos o cualquier acto de incomodidad generado o vivido por ustedes, estarán abriendo la puerta a la transmutación. Si han sentido miedo, dolor, rabia, incomprensión, si no han podido hacer más de lo que creen que hacen, también entrará el perdón, la misericordia y, por supuesto, la sanación de sus emociones y sentimientos. Lo más puro no es perfecto. Lo más puro es humilde y es sereno.
Solucionen siempre sus problemas personales con las personas o seres humanos como ustedes, con los que tengan realmente conversaciones pendientes o cosas que solucionar. La verdadera fuerza de su naturaleza les ayudará a convocar al espíritu que les ayude a hablar con la mayor resonancia y fuerza necesaria.
Paralelogramo tras paralelogramo, se conectan todos los hologramas de vuestros seres y se manifiestan en la Tierra porque así lo merecen ustedes y la Tierra. Están dignificados en Dios, en el mismo Espíritu que ha abierto la comunicación a través de este caudal. No son mejores que los demás, pero desde luego tampoco son diferentes a los demás. Son exactamente algo maravilloso y extraordinario que permite reconocerse a través de este Sagrario.
La evidencia de que cambian los tiempos la ven a su alrededor, aunque a veces quieren mirar hacia otro lado. Les diré que es necesario que miren con amor y que recuerden el perdón, el sentimiento de amor que son, todo aquello que se reconoce a través de su Ser superior, de su Ser interior y de su propia naturaleza. No hay una rareza, sino una singularidad; no hay una especialidad, sino algo muy singular. A través de lo que se abre, se conecta esa verdad. Y esa verdad son ustedes siempre, en realidad.
A través del campo María Pilar