Mensaje de la Tierra (IV)

2020-11-01
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Sin haber donado amor no se puede otorgar. Habéis sabido y sabéis que sois una humanidad venida por participio del Verbo, amada por el Logos como Dios y Dios como el Universo. Formáis parte de un elenco reservado por el momento. Activáis una conciencia de nueva esencia y permitís que en ella la contienda se disuelva por completo. Mediadores de experiencias. Liberadores del don. Aquel que sienta el amor en su interior y la comprensión activará sus caminos, sin miedo por su destino, y comprenderá que está al abasto de la luz.

Cuando fuisteis convocados, cada uno por su lado, no sabíais que estaríais conectados por amor; la sinceridad, el don más elevado; la verdad, lo que ha otorgado desde el corazón alado la simiente de la luz divina. Permitid que cada alma elija el camino a seguir y después de dirimir, de comprender y sentir, honrar a la Tierra Madre para poder escribir sobre las finalidades armónicas e inarmónicas que llegaron hasta aquí. Sin mencionar que sois luz, porque eso lo sabéis, sois simiente de la Tierra y complemento viviente de todo aquel que resiente en él la oportunidad de generar un espacio para abrir otros espacios donde se pueda sentar la eterna humanidad.

 

Los señores de la luz. Los hombres de guerra. Los satélites conectan toda vuestra información. Estáis al abasto de Dios y la comunicación de los hombres que persisten en controlar las acciones que se eligen a través del don divino, el del Ser como individuo.

 

Sentiros sobre las flores porque los árboles son algo más elevado. Sentiros sobre las flores de colores, mil colores. El espíritu que anida dentro de la Tierra Viva comprende que sois la Vida como la Vida que sois.

No estáis emancipados todavía de vuestros actos; algunos. Todos no están preparados para dar y otorgar al mismo tiempo lo que pide su elemento. En un lugar diferente donde la gente comprende sin entender y se siente libre de atadura aún no podéis comunicar todo cuanto está predicho, más aún sugiero que seáis primero discípulos y maestros. Para comunicar todo esto debéis estar en paz, en serenidad, activados en vuestra propia verdad.

Dentro de unas semanas se conectará el canal a una fuente universal y sin duda que estaréis invitados a saber todo cuanto se ha movido y que ha de acontecer. Respirar dentro de Dios que sois vosotros mismos. Activar esa Conciencia que no tiene ciencia y que es camino interior.

Sois como el alabastro: duros y frágiles, bellos, ribeteados en todos vuestros lados, la veta de luz divina. Contenéis sabiduría, conocimiento, divertimento. Contenéis todo dentro de vuestro elemento y la Tierra se conecta a través de la presencia de la belleza que sienta al aunar el corazón elevado al don de la comunicación. Se sitúa el eje. Se reconstituye. Se restablece. Se equilibra. Pero no enmudece. Todo lo contrario. Se conecta a una fuerza viva llamada Madre, llamada Naturaleza. Llamada Tierra. Llamada Tera para los que partieron de ella y se hallan en las estrellas.

 

Deberíais comprender; comenzaréis a saber. Y el hecho de comprender llegará tranquila y serenamente. Bendita vuestra simiente porque sois semilla y don. Estimad la convivencia con todos alrededor. Cuidad de los desvalidos, de los ancianos y niños. Respetad vuestro camino. Sed amables con los hijos del destino que han venido a clarificar, a dar información y a otorgar la libertad a los que esclavizando se están. En más de una ocasión querrán derribar la puerta aquellos que no comprendan, pero dejarles pasar y con la mano otorgarles un lugar para escuchar. Serán más libres de hacerlo que si inquirís en ellos y los queréis apartar. Es más fácil que vosotros en conciencia os abráis a la experiencia para poder comprender, simple y llanamente. Sois la simiente. Haceros presentes; siempre que lo permitáis desde la tranquilidad. La esfera conectará las diferentes esferas y sin duda, sin dudar, a través del canal se equilibrarán. No os cerréis a la vida. Abrid caminos distintos; todos. Todos sois y seréis bienvenidos, por amor y con designio. El Amor no es distinto para unos ni otros. Es para todos igual. Respeto y comprensión.

Alabad vuestra misión y compilar entre todos, en los diferentes modos, toda la información.

Bendita la luz divina.

 


1 de noviembre de 2020. Último mensaje de una serie de cuatro.

A través del campo María Pilar